jueves, diciembre 01, 2016

Los mayores se toman muchas libertades sexuales [1-12-16]


«Los mayores se toman muchas libertades sexuales»

El catedrático Félix López advierte de que la vejez «será un problema porque el único miedo que tienen interiorizado es el del embarazo»

¿Por qué asumimos riesgos en nuestras relaciones sexuales? El catedrático de Psicología de la Sexualidad de la Universidad de Salamanca, Félix López, respondió a la pregunta del millón en la sesión inaugural del congreso. ¡López desgranó varios factores, partiendo de la propia condición humana, por la que nuestra conducta no se adecua siempre a nuestro razonamiento. Es la diferencia, dijo, «entre lo que se dice y lo que se hace», por lo que «jamás va a existir el riesgo cero».

A ello hay que añadir la dinámica de la sexualidad, una pulsión muy fuerte «con la que enseguida disfrutamos muchísimo». En esta tesitura, «en la que la mente humana analiza un placer inmediato y seguro, y un riesgo solo probable, que aparecerá en el futuro y que además no es fatal porque se ha cronificado, la probabilidad de tirar por la calle de en medio, de no ser coherentes y asumir riesgos, es muy elevada».

«En silencio»

Es una conducta ejercida en una sociedad en la que «aún se guarda silencio» en la familia acerca de la sexualidad, que se trata de «forma anecdótica» en la escuela. Los gobiernos aseguran que es necesaria la educación «pero luego no hacen nada», criticó. «Seguimos en esa situación de silencio, lo que hace muy difícil que cuando dos personas se encuentran en una relación ocasional se pongan a hablar abiertamente de la necesidad de evitar los riesgos», señaló López.

Además, ahondó en que la sociedad de mercado «nos maneja» en dos valores: el del trabajo y producción, y el del consumo. «Así que dividimos la vida en dos momentos: el tiempo de sufrimiento y el de placer». Y este último «lo convertimos en tiempo de locura, en un ocio de alto riesgo que se asocia a la necesidad de consumir alcohol y drogas». En este contexto, «y con una sexualidad en silencio y sin hablar, es muy difícil que controlemos los riesgos».

López también hizo hincapié en que en la sociedad occidental actual la sexualidad se ha convertido en un producto de mercado y ha sustituido los viejos mitos por los nuevos. «Hemos pasado de decir que la sexualidad es mala a decir que es saludable, y eso es verdad, pero el nuevo mito es que para tener salud es obligatoria. Estamos presionando para que sea obligatoria en casi todas las personas: los adolescentes, jóvenes e incluso mayores. Y una sexualidad obligatoria genera muchas contradicciones», dijo. El catedrático se refirió en concreto al colectivo de las personas mayores en una sociedad en que «el valor máximo es ser joven. Se lucha por mantener un estilo joven, y en el futuro vamos a empezar a tener problemas serios con la vejez, porque la gente en la vejez se toma muchas libertades, y el único miedo que tienen interiorizado es uno que no está justificado: el embarazo».

El catedrático recordó que antes se hablaba de «represión» o de «fidelidad», y ahora se habla de «poliamor, lo que antes se decía promiscuidad. La gente que haga lo que quiera, pero con responsabilidad ética y sanitaria».
 

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